Massa, el peor de todos

Batriz Sarlo habla dentro de los limites de su intelección, decreta en un reportaje que le hace su compañero de tareas Jorge Fernandez Diaz, que Sergio Massa que "es la cumbre del dirigente populista, lo que hace es halagar aquello que la gente quiere". En algún punto parece confundir populismo y demagogia pero no es un problema de comprensión lo de Sarlo si no una deliberada construcción de escenario.

El partido de los iluminados, el de los se creen naturalmente llamados a guiar a  una mayoría "ignorante" termina siendo siempre el partido de los verdaderos ignorantes. Como toda minoría que no padece complejo de inferioridad, muy por el contrario, es intrínsecamente autoritaria, rallana en la sicopatía.

Montoneros y ERP, ademas de las facciones de la ultraderecha,  eran minorías que se consideraban lucidas cuando ellas mismas -y según sus propias varas- se comparaban con las mayorías. Comprensible esa lógica cuando se le contraponía a las mayorías en democracia y estas marchaban no de acuerdo a sus designios ideológicos. Al menos en aquellos tiempos no eran hipócritas respecto a la república -a la que detestaban- y a la democracia.

Sarlo -como Carrió, CFK y tantos otros y otras- es autorreferencial.

La República y la democracia son callejones sin salida para estos autoritarios lobos disfrazados de apacibles corderos. La República empero es la bandera elegida para luchar contra la "dictadura de la mayoría". En su nombre van a pelear contra quienes le arrebatan la misión de gobernar que les cabe por derecho divino -si creen en algo sobrenatural-, en su defecto por los fundamentalismos paganos que suelen ser las ideologías. 

Hay que diferenciar "populistas" de "progresistas" -entre las que esta Sarlo en este menjunje.

El carácter distintivo del populismo es precisamente que aloja una variedad infinita de demandas que logran unificarse a través de un enemigo común y que son conducidos por un lider inapelable. Es igual que sea la rabia antioligárquica de CFK que el racismo antiinmigrante del hijo de inmigrantes -aunque no latinoamericanos- Macri. La vaguedad resulta ser un instrumento a su servicio. http://omixmoron.blogspot.com.ar/2015/04/post-largo-para-el-que-no-se-anima.html

"La corriente de crítica y pensamiento político que se podría denominar “progresista liberal” cuestiona a determinados poderes económicos y a la represión estatal a las organizaciones populares, combinados, en grado variable, con postulados más propios de la tradición política liberal: la denuncia contra la concentración de poder institucional en la Presidencia, la marginación del Congreso en la arena de toma de decisiones políticas y el poco respeto al funcionamiento genuino del federalismo. Pasa por alto que la experiencia en la semicolonia prospera que es la Argentina -ubicada en la periferia-  la consolidación de los avances de derechos sociales se dio en marcos de concentración de poder en el Ejecutivo y de hegemonía parlamentaria, más que en escenarios de presidencias débiles y pluralismo en las legislaturas. Los dos movimientos nacional-populares que encarnaron la expansión de derechos electorales y sociales en Argentina, el yrigoyenismo y el peronismo, tuvieron una impronta centralizadora muy fuerte en la Presidencia, tanto frente a las provincias como frente a la Corte Suprema o el Congreso" (S.E). http://omixmoron.blogspot.com.ar/2015/04/mstolbizer.html 

El escenario electoral para Carrió, se juega dramaticamente entre Republica y Mafias. Para Freddy Storani, Macri y Sanz debe ser dividido entre República vs Populismo. Para Sarlo y la progresía urbana debe ser dividido entre Progresismos y derecha y funcionales a la derecha. Ahí ubica al populismo ya sea de derecha o izquierda.

Massa, es para Sarlo. el sumun del populismo,."Dice lo que la gente necesita", se escandaliza la señora. No dice  lo que el político le puede ofrecer a las porciones de "gente" sino lo que las porciones de "gente" necesitan y piden, Massa no resiste la tentación de endulzarle el oído a ese ser inferior que es la mayoría, de ahi su peligrosidad.  No conduce, es conducido, no disciplina a las mayorías sino que la mayoría lo convierte en su instrumento.

Sarlo quiere seguir siendo parte de un grupo de intelectuales-políticos que no reparan en el hecho que que los grandes momentos de ampliación de derechos en Argentina vinieron de la mano de movimientos populares mayoritarios que tuvieron que plantearse la confrontación con el poder real que nuca está en el estado sino en la economía. No hay posibilidad de armonía entre los postulados marxistas de progreso social y los principios liberales, aunque crea que es posible.

Massa no es populista, no es progresista, no es liberal. Massa es nada mas que el primer político argentino de este siglo XXI, que amenaza con renovar los staff políticos, jubilar a lideres políticos desgastados por tantas crisis, negarle la condición de faro al estado mayor intelectual portuario -entre los que se incluye Sarlo-,  y cambiar las reglas de juego económicas argentinas en beneficio de la mayoría (esa para la cual habla, a pesar del prurito que le cause a los y las Sarlos del mundo.

Massa "se il nemico, non è più un essere umano".