domingo, 26 de agosto de 2018

Gobernabilidad, garantías y coso

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Yo veo el futuro repetir el pasado
Veo un museo de grandes novedades 
Y el tiempo no para, no para, no
Disparo contra el sol con la fuerza del ocaso
Mi ametralladora está llena de magia
Pero soy solo un hombre más
Cansado de correr en la dirección contraria




Parafraseando el pensamiento de Robert Musil en  "El hombre sin cualidades" (Der Mann ohne Eigenschaften), la inacabada novela del austriaco, perdemos tiempo en preguntarnos ¿Que es Macri?:
a.- ¿una veleta manejada por el viento?
b.- ¿un ladri que se la va a llevar toda y no va a tener que devolver una moneda?

El politico no es el politologo, la academia va a satisfacer sus propias demandas, su ansia de abordar, abarcar, saber, conocer y el politico tiene que pensar en el poder. Y en virtud de atender esas sutilezas el tiempo corre. 

Si, el tiempo; ese enemigo silencioso común del cristinismo, del peronismo no cristinista y del mismísimo Macri.

Dice Diego Genoud:
Queda poco tiempo para sentarse a mirar el show judicial de Claudio Bonadio, las horas interminables del debate por los allanamientos, las nuevas revelaciones en la saga de los arrepentidos. En la intimidad del poder, en el círculo estrecho de los que gobiernan al lado de Mauricio Macri, ya no hay margen para disfrutar las desventuras ajenas. La escena de la polarización, tan redituable en 2015 y 2017, hoy divide opiniones y -sobre todo- queda muy lejos.
Pensar en la fractura del peronismo y en Cristina Kirchner como adversaria potencial es fabular con elecciones que deberían ser mañana, cuando el camino de cornisa se torna más fino, más resbaladizo y más complejo, según la confesión de Marcos Peña. Ni siquiera el desafuero de la ex presidenta parece captar la atención de los que intentan gobernar en medio de la urgencia. Manda un minuto a minuto que no se televisa y lo más claro es la incertidumbre. Qué más quieren los mercados, la pregunta que domina a Macri y complica su camino de cornisa...
Por: Diego Genoud- Completo en https://elcanciller.com/nota/5734

¿Porque vamos a soportar el malestar económico solo nosotros? es la pregunta que campea en la base de la sociedad,  la mas numerosa, la potencialmente mas levantisca. ¿Cual es el limite que marca la legitimidad de la exigencia de sacrificios?. ¿El pobrerio se va a aguantar calladito la boca el control social y las represalias (esto al menos es lo que se interpreta de las actitudes de comunicadores como Iglesias) de las clases altas representadas por el macrismo que le exigen el sacrificio del plato vacío?.

Los  que nos gobiernan, malcriados hijos de dudosos meritocratas, han notado que el tiempo se les acorta y se juegan el todo por el todo, suicida, al marketing y al mero mero prejuicio,-social- sobre clases altas y a la continencia mediática sobre las bajas y le prenden la vela a estas herramientas comunicacionales que suelen manejarse a nivel empresario pero que poco tienen que ver con la política de masas. Si les sale mal le va a pasar lo mismo que al rosismo, van a tardar 50 años en mostrar su cara en los eventos sociales y mas de cien en presentar una oferta apetecible para la sociedad.

Ayer en la mesa de la Señora Mirtha, Jesus el pollero que denunció a Jose "bolsos" Lopez le dijo en la cara a los comensales que antes vendía pollo y ahora no se vende(o sea que pasamos de comer carne de vaca al pollo y ahora ni eso). El cristinismo podrá presentar el asunto como "roban pero distribuimos pollo", pero eso no es atractivo ni allana el camino del peronismo para regresar al poder, aunque muchos se engañen, la agenda del año que viene empieza a llenarse y ya tiene dos puntos irreductibles: anti-corrupción y distribución y trabajo. La seguridad desapareció de los medios, después de todo allí empezó. Parecen ser los puntos dominantes, veremos quien los corporiza.

Hasta el proximo domingo.

Agrego al bebe Righi hablando sobre cuanto afectan la imparcialidad del tribunal y la presunción de inocencia las redefiniciones mediáticas de casos penales.

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