hace 34 años, yo sentía miedo en serio

Amalia Granata lo dijo "esto es una dictadura, acá pasa cualquier cosa, tengo miedo" y resumía -repetía sin saberlo- el eje de la campañita esta que se huele a una legua: La dictadura y el miedo, ejes del próximo fallido intento de manipulación a través del multimedio que goza de posición dominante en el espectro comunicacional argento.

Patética la intentona.

Manotazo de ahogado.

Pero no es del multimedio que goza de posición dominante en el espectro comunicacional argento que quería hablarles. Tampoco quiero debatir con lasdos presuntas víctimas que no han sido criados para actores al menos por lo que se vió en el spot que vi ayer.

Quiero hablarles del sútil paso al costado del diario "La Nación" que está dando desde hace más de un mes decididamente.

De alguna manera se despega del atribulado Clarín para jugar su propia carta.

El periodista y a veces operador Pagni resume la tesis "lanacionista" en este párrafo

"La raíz del problema está en la forma en que la Presidenta y su esposo interpretaron la derrota del 28 de junio pasado. Ellos no creen que la ciudadanía sea autónoma cuando hace un balance negativo de su gestión. Ocurrió otra cosa: una conspiración orquestada en la cabeza de la gente por parte de corporaciones que, con la prensa como nave insignia, buscan abortar una democratización de por sí exitosa."

Sin embargo, noerían ellos -el matrimonio presidencial- los únicos culpables de los males que nos aquejan. El motivo de nuestros problemas viene de arrastre. Pero, para mi sorpresa, La Nación afirma que la culpa no la tiene Perón (bueno, no toda)

Es decir, para la institucionalidad argentina, el presidente sigue siendo -valga la expresión bolivariana- un rey sin corona. El problema no es, entonces, que los Kirchner tengan ensoñaciones monárquicas -que las tienen, sino que la Constitución les permite concretarlas.

Una lectura kirchnerista rápida entendería que "tá todo bien con el pelaú y la tribuna de doctrina", por que prende el ventilador y echa caquita a diestra y siniestra de arco político argentino, asi quedamos todos ensopados en mierda.

Se refuerza la no política, se desacredita todo hecho político. Y se crean las condiciones para imponer cambios que siempre, siempre, son manejados por la mano invisible del mercado.

A mi me parece que es para preocuparse por que da la pauta una parte del stablishment pretende ir derechita (o derechita) hacia la Constitución Nacional.

Se quieren cargar la obra de Alberdi.

Pretendiendo ser sus celosos defensores, buscan deformar el sentido común hasta que se entienda que para bién de la república lo que hay que modificar es la carta Magna y una vez alli, sin pactos -contrariamente al '94 y otras tantas veces en nuestra historia- y a merced de las corporaciones y su nave insignia mediática ponerle un cerrojo a la apropiación de rentas extraordinarias y a la reducción de la concentración económica que, en definitiva, es lo único que les importa.

He dicho.

Frase para cerrar, citada por Walter Bezzuzo

"Hasta nuestros dias se ha confiado en los periodicos como portavoces de la opinion pùblica. Pero muy recientemente, algunos nos hemos convencido, y de un modo sùbito, que no gradual, de que no son en absoluto tales. Son por su misma naturaleza,los juguetes de unos pocos Hombres ricos. El capitalista y el editor son los nuevos tiranos que se han apoderado del mundo.Ya no hace falta que nadie se oponga a la censura de la prensa . No necesitamos una censura para la prensa. LA PRENSA MISMA ES LA CENSURA. Los periodicos comenzaron a existir para decir la verdad y hoy existen para impedir que la verdad se diga." G.K.CHESTERTON 1917




Damien Saez, hijo de un español y una argelina le canta al heroe de la resistencia afgana.


Homenaje a Ahmed Shah Massoud