Cualunquismo (sectores medios que se suicidan)

A quien le habló el funcionario de la cancillería estadounidense Arturo Valenzuela cuando -según no pocos- derrapó y que provocó que algunos corrieran presurosos a desautorizarlo. Para mi le hablaba al subconciente del cualunque argento. Sus palabras, cual combo de semilla transgénica y glifosato, se dirigierón al terreno fértil que es ese "ciudadano" inducido a la crispación, que se ha vuelto intolerante y hasta racista, bombardeado por un millón de operetas, deliberadamente elegido para la venta de celulares corporativos con funciones que jamás usará. Exagerando diría que se trata de un experimento de lavado de cerebro colectivo, pero no, es solo un nuevo cuento del tio, ni siquiera sofísticado, que consiste en hacer que alguien acepte mansamente transar sus tierras por cuentas de vidrio y llegado el momento exija la seguridad jurídica para poder seguir perdiendo en un sistema que no le da chances de ganar.

El representante de los dueños putativos de cierto patio trasero acorde a su estructurado pensamiento lanzó la frase para quedar bien con el cualunque y después lanzó una estudiada y paniaguada rectificación para declarar un empate técnico diplomático en el asunto.

Cuando aclaró que no dijo lo que dijo. Ya no interesaba, lo que dijo estaba guardadito ahi, en el subconciente del hombre común. Como algunos virus informáticos sus palabras ingresaron al interior del sistema y allí quedan, instalados comodamente, a la espera de la oportunidad para activarse y atacar.

La opinión pública argentina, la que consume medios en nuestro pais y a la que estos eligieron como interlocutor del dialogo imaginario es -básicamente- la clase media y media alta de capital federal y conurbano y las principales ciudades del interior. Valenzuela se dirigió en sintonía con los deseos y miedos que anidan en el espíritu de ese público.

Decía Mariano en Artepolitica.com que entre los detractores de este gobierno "se cuentan las amplísimas mayorías de las clases medias (intuyo, al menos a partir de mi experiencia personal),". Agregaba que estos sectores crispados a más no poder por un gobierno al que le han hecho creer que no es el suyo, mientras Omix predica en el desierto cuando señala como error estratégico al extremo clasemedismo del los "K", sector social al por cierto pertenecen culturalmente los consortes inquilinos de Olivos.
Mariano destaca el perfil de viciosos de la autoflagelación que caracteriza a estos sectores medios afirmando que:

No hay nada que hacer ante gente que pide a los gritos que quiere pagar más caros la luz, el gas, el agua, el teléfono, el celular, la leche, el pan, la carne, la nafta, el gasoil, el colectivo. Todas esas cosas, parece increíble tener que decirlo, son baratas en Argentina, gracias al “populismo expansionista del gasto público” (en Buenos Aires, sobre todo, pero en el interior también). Y se confirma visitando Mendoza, o Entre Ríos, y viendo cómo chilenos y uruguayos se cruzan la frontera para comprar acá...

Y nosotros, desde acá, pedimos que aumenten, seguramente porque en el fondo lo que queremos es, cuando llegue ese momento, poder decir: “qué hijos de puta, cómo aumentaron todo”.

Vemos que el juez Griesa de Nueva York, se suma a la movida garantista (de la rentabilidad empresarial buitre) y tambien el emblemático sindicato de jueces (Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional). Estos últimos dias y para reforzar la idea fuerza de que se amplía la brecha de la inseguridad se ha sumado el corifeo de abogados que opina, a veces con total impunidad, llamados pomposamente juristas o constitucionalistas. Hoy la excusa para su aparición en escena (a lo Zulma Lobato) la dió el caso Redrado. Se ratifica el modus operandi de la patria mediática de convocar al sector "1853-1880" de abogados para que nos ilustren haciéndonos creer que los norteamericanos no son hijueputas cuando reforman su constitución cada siete años y por que la respetarían a rajatabla, mientras nosotros la violamos constantemente y cada 50 años amenazamos con reformarla.

Estos buenos muchachos son los garantes de la intangibilidad constitucional. De una Constitución, que para ellos no modificó su razón de ser desde 1853/1880, por que la ven como la columna vertebral que homogeneiza la economía del pais chico, creadora de la necesaria estructura jurídica que garantiza las libertades absolutas que el capitalismo (originariamente europeo, hoy global) en actitud de "rapiña" exije para radicarse y desenvolverse en los paises periféricos y sujeta a las condiciones de desarrollo que el gran capital requiera (notese quer no dije que la sociedad argentina requiera), que en lapráctica faciltaron la enajenación -subreptica o expuesta- de los recursos naturales y las ganancias del trabajo argentino a expensas de la calidad de vida y expectativas de los sectores populares.

La constitución escrita es para estos hombres y mujeres situados y limitadísimos, el reaseguro de que los sectores concentrados de la economía y los beneficiarios de un esquema exportador deproductos sin valor agregado que aspiran a ser "el sector dominante" en la Contitución real del pais podrá manteniendo su mano en el timón.

Ademas es otra vuelta de tuerca por imponer la tecnocracia y la mera gestión permitiéndo el laissez faire para los elementos predatorios en el mercado. Un disparate como hacerle una revisión técnica al auto antes de las vacaciones y que permitamos al mecánico opinar sobre los destinos donde vacacionar y que nos imponga el que le parezca más adecuado a nuestro bolsillo y grupo familiar.

Geraldhino en su blog redondea la idea a más no poder, y a mi se me hizo irresistible pegar su opinión al respecto:

"Convocar a "constitucionalistas" para discutir la actualidad política... ¿no vendría a ser algo así como tratar de entender el fútbol charlando solo con árbitros y preguntándoles sobre el reglamento?"

Todos estos dislates no serían posibles si no existiera el cualunque.

El periodista Pablo Chacón escribiendo para la revista Zoom describe a este hombre cualunque al que se dirigen tanto funcionarios extraños, políticos garantes de esquemas perimidos de sujeción a un orden global en el que por ley general perdemos los argentinos y esos usías

Supongamos que exista la categoría de hombre común como una categoría política...El cualunquismo, según esas fuentes,... (es un) elogio al hombre común que trabaja, tiene familia, defiende la propiedad privada, que en épocas de violencia considera la posibilidad de la pena de muerte, ama el deporte, el aire libre, el sol, la ley, el orden y la eficacia policial. El hombre común es el hombre sencillo, el del fútbol, la bandera, la familia, el que grita nació, nació, el que se quiebra y no se sabe si se ríe o si tiene espasmos mientras pucherea murió, murió...
El cualunquismo es el heredero pacífico de la última dictadura cívico-militar: su clientela es ese sector amplio, mayoritario, la clase media conservadora y aterrorizada y amortizada para nada, asegurada en cementerios y prepagas, aterrorizada por el irreversible deterioro de la situación social. Es ese clase que no quiere creer pero sabe que la política es un costo, que junta roña y resentimiento. Es la clase que audita las crónicas extremas.

El cualunquismo, al igual que sus parientes ideológicos -el poujadismo francés de la década de los cincuenta y las "mayorías silenciosas" de los Estados Unidos en los setenta- exalta al individuo y a su trabajo, y postula la defensa de la propiedad, la ley y el orden como los valores básicos de la convivencia en una sociedad. En ese marco, la política es una interferencia artificial y perniciosa, generadora de conflictos innecesarios y perjudiciales para la convivencia social. El cualunquismo es, en síntesis, un heredero pacífico del fascismo en la época posterior a la Segunda Guerra Mundial pero enmarcado en la ideología única es un arma para la antipolítica que deja el manejo de todo en manos de la técnocracia y del Dio's Mercado.

El Cualunque argento opta por Cobos por que es pacífico, asiente los dichos de Valenzuela por que es amante de la ley y del orden y apoya a la jueza Sarmiento por esas mismas razones.

Nosotros, los feos políticos peronistas, estuvimos en inferioridad de condiciones por mucho tiempo frente a las huestes antipolíticas por el desajuste identitario provocado por los inquilinos de Olivos que con un anclaje diferenciado de los sectores populares de menores recursos (los sectores medios tambien pueden ser considerados populares) inflaron las posibilidades del ensayo de producir el Frepaso 3.0. El tiempo nos está dando la razón, necesitabamos un movimiento que convoque desde estos sectores con su particular forma de ver y sentir y desde aquí haga las necesarias alianzas con los demas sectores, en muchos casos ganados por el cualunquismo. Acuerdos que vayan más allá de las elecciones y que llegado el caso gobiernen para los mayoritarios sectores populares, es decir que no sean los gobiernos de Repsol o de Monsanto.

Manolo (que es Barge), apenitas electa como Presidenta CFK, denuncia la estupidez de los kirchner de los primeros cuatro años de seguir apostando a comunicarse y manejarse en clave cualunque.

Estoy escuchando a la PresidentA electa y parece una Directora de Escuela, dando una clase de Buenos Modales Democráticos. Lo podría entender y soportar si nos hubieran dado señales sobre una futura conducta Peronista. Soy de los que piensan que "somos" Justicia Social o no somos nada. Después de tantas vueltas terminaron recalando como siempre en la "División Las Heras", los negros impresentables. La Mazorca y los Feudales dieron el numero y el Presente, como de costumbre. Como siempre, tienen que esperar, en nombre de la Concordia y la Pluralidad Nacional. En estos últimos 4 1/2 años, se gobernó en función de los Sectores Medios, a nosotros nos tocaron las migajas. Si pedimos aumentos para los trabajadores en Blanco son inflacionarios. Si pedimos blanqueo para los "negreados" hacemos peligrar el crecimiento. A pesar del rechazo masivo de la Burguesía, Pequeña y Grande por igual, la siguen cortejando. Son ciegos a su Desprecio, ellos solo aceptan la rendición incondicional. Las admiradas palabras de Nelson Castro, Silvestre y Bonelli;me acongojan, ¡Otra vez Sopa! Todos los analistas señalan la derrota gubernamental en los sectores urbanos. ¿El GBA no es Urbano? ¿La Ciudad termina en la General Paz? ¿Siguen considerandonos aluvión zoológico? Calentura, mucha calentura y cansancio. Para mi esto no es mas que el Frepaso 3.0

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