sábado, 12 de diciembre de 2009

Córdoba, la crisis, la tierra y algunos derechos que se pierden

Córdoba tiene uno de los bolonquis económicos financieros más dificiles de resolver. No hay salvataje que calme la sed de divisas que necesita cotidianamente para hacerla funcionar 24 horas más. Como la California de Arnold "Terminator" está al borde de la quiebra.

La Argentina de los últimos años logró un buen paraguas contra las crisis del sistema mundial, pero el escudo protector no funciona para las crisis generadas dentro de nuestra burbuja.


Sin embargo con "consenso" y realpolitik todos los partidos políticos cordobeses -pejotas variopintos, u-ce-erres variopintas y juecismos varios- podrían enderezar una situación que comprometerá a los futuros gobiernos provinciales y puede complicarnos la vida al resto de los argentinos que hasta ahora veníamos esquivando las crisis internacional (hasta la actual de Dubai).


En tiempos del primer Perón se produjo una versión argenta de reforma agraria. Bajo el lema "la tierra para el que la trabaja" arrendatarios y peones se convirtieron en
propietarios de fundos de unas 200 hectareas.
Los terratenientes se vieron obligados a venderles estas tierras en una opereta financiada a 30 años por todo el pueblo argentino a través del Banco Nación.
Córdoba no fué la excepción.
A los chacareros se los cuidó siempre, por eso los subsidios ni bien caian dos gotas o piedras, por eso los créditos blandos que nunca terminaban de pagar por que se les condonaban las deudas, por eso las re-refinanciaciones, las prebendas. Si lloran es por que saben bien por que lo hacen, o mejor dicho "para que".

En la zona de Oliva, Manfreddi, Oncativo (el sudeste cordobés) la hectarea paga un impuesto sobre una valuación cuya base fue ajustada por última vez en 1992. El valor de mercado de esa hectarea es de U$ 14mil.

Algún gringo con sentimiento de culpa me chusmea que más o menos -a plata de hoy- es equivalente a un valor fiscal de cien dolares la hectárea lo que garpan de impuesto.
Otro gringo -escondedor y llorón- me aseguró que en realidad tributan por el 20% del valor de mercado.

Será mucho pedirle a los cordobeses que circunscriban la explosión de la bomba a sus propias fronteras.

Que tal si se ponen de acuerdo de la Sota, Schiaretti, Juez, Aguad, etc y actualizan el valor de este impuesto inmobiliario rural. No es mucho pero en algo ayudará. O pretenden siempre quedar bien con todo el mundo contando chistecitos que ya no divierten a nadie.

Si, ya se que aún asi sigue siendo injusto. Se bien que debieran pagar por lo que tienen y no por un porcentaje de ello, se bien que es lo mismo que institucionalizarle la evasión del resto. Pero eso debe quedar para otro tiempo, un tiempo de fortaleza que hay que construir.

PD.:
Dos gobiernos se animaron a la reforma agraria progresista en Argentina: Sarmiento (y sus "cien Chivilcoyes") y Perón.
Hay que empezar a pensar la tercera, sobre la base de que el derecho de propiedad les fue concedido por el estado a los actuales titulares por su condición de "trabajadores de la tierra". En razón de convertirse uno solo de los beneficiarios y sus derechos habientes en rentista se opera para ese caso individual un socavamiento de la razón por la cual se instauró el derecho original.
Simplemente por que si alguien renta su tierra y no la trabaja por un periodo de tiempo prolongado se queda sin sustento la protección estatal de su dominio sobre el fundo.
Para empezar a pensar, solo para eso, sin que sea para sacarsela a los que la trabajan, ni servirla en bandeja a los grandes propietarios que ya concentraron demasiado. Vaya a saber quien sabe si no conviene inmigrantes de la patria grande sudamericana que estén dispuestos a hacer el esfuerzo que los argentinos ya no parecen estar dispuestos a hacer.

13 comentarios:

Ariel dijo...

Y, sí, Omix: contribuyan muchachos; son impuestos nomás, mucho mejor que la cárcel o el descalabro económico.
Y una reforma agraria se necesita también.

Ulschmidt dijo...

... también podrían devolverle parte del 35% que le afanan con las retenciones...

OMIX dijo...

Sabés lo que pasa Ulschmidt: no me gusta la evasión.
Y tengo que decirte que estos ex chacareros (hoy rentistas) en su mayoría alquilan y cobran al contado al empezar la campaña, en un contrato todo en negro.
El derecho a exportación lo van a tener que pagar quienes exporten, yo hablo de otra cosa, que garpen lo que les corresponde, por que lo cierto es que un jubilado en el pueblito de Oliva paga proporcionalmente por su vivienda unifamiliar que estos tipos por su campo.
Vos saltaste, por las rete, te parecen injustas, entonces acompañame en esta por que esto te tiene que parecer injusto también.

OMIX dijo...

Pero mi post es para lo largo, para lo corto es Cordoba.

Mariano T. dijo...

El impuesto inmobiliario es mucho más justo que las retenciones. Pero viene en la boleta, vos pagás lo que te piden, el importe no es voluntario.Por lo menos el de mi casa que esta a un 20% del valor venal es así, no viene el monto a pagar en blanco.
Cuando se puedean eliminar las retenciones, sin duda los gobiernos provinciales van a subir sustancialmente el inmobiliario.

Mariano T. dijo...

Y lo de la reforma agraria empezando por los de 200 hectáreas es un planteo típicamente kirchnerista, porque los de miles de hectáreas son todos amigos, o van a ser muy manejables con un poco de miedo.
Menos mal que es imposible, porque para expropiar hace falta ley del congreso y pagar el valor real, si es el que vos decís cuando expropien 10.000 ha se quedan sin mosca.
La idea de traer bolivianos también es notable, si hay arrendamiento, también hay arrendatarios, pero para un kirchnerista no sirven porque son contreras.
No se exciten mucho con la idea, van a tener que posponerla hasta que saquen 65% como Evo. No solo por los votos en las cámaras, sino porque la idea es la génesisi ideal para cortes de ruta y cacerolazos hasta que se vayan.

OMIX dijo...

Mariano estas cosas no se plantean de la noche a la mañana, llevan decadas.
Estoy hablando de Sarmiento y de Perón, ¿sabés cuantos diminutos kirchneres, coboses y duhaldeses van a pasar hasta que venga un iluminado?

Mariano T. dijo...

Y esa es la gran idea por la que hay que esperar un Mesías?
No creo que el Destino malgaste a un Mesías para un objetivo tan estúpido.

OMIX dijo...

Una reforma agraria no es un objetivo estúpido.

La tierra no es un bien de renta, ni aqui ni en Europa, ni en USA.

La tierra es para el que la trabaja, `pero estamos muy lejos aún.

Hay unos flacos (wally y Pestanha) que aciertan al decir que la revolución que hizo Perón fue precedida de una revolución cultural, y yo aqui a esa todavía no la veo MarianoT.

"Habíamos contribuido a la maduración de un pensamiento nacional que sólo esperaba el momento histórico y su conducción para manifestarse"
ARTURO JAURETCHE http://www.peronvencealtiempo.com.ar/franciscopestanha/notas/visperas.html

Todavía hay mucha fiesta de la renta que disfrutar, quedate tranqui, ni me respondas por que eso levanta polvareda y por ahí algún gil se aviva.

Mi post es nada más que pegarle una patada al chancho para saber quien es el dueño.

Mariano T. dijo...

La tierra y las propiedades inmobiliarias en general generan renta, eso no lo vamos a descubrir ahora. El tema es quien se la lleva.
Hasta ahora en todo el planeta se la lleva el dueño, hubo un experimento en el que se la llevaba el estado pero terminó mal hace 20 años.

OMIX dijo...

Disfrute el domingo, MarianoT.

Disfrute la renta extraordinaria sin transpirar, Mariano T.

Disfrute de la vida que es tan bonita.

Disfrute amigo y no se preocupe por una idea tan estúpida.

Mariano T. dijo...

Mire Omix, puedo decir con orgullo que nunca cobré una renta, salvo los dos años que alquilé mi casa para la temporada cuando la estaba pagando. Y que nunca cobré un centavo del estado, salvo un año como ayudante de primera en la Facultad, después de haber trabajado dos años ad honorem.

Mariano T. dijo...

Y volviendo al tema, y al releerte, me parece que tenés un problema de c0ncepto sobre la palabrta "renta". Y no es menor que para debair ideas tenemos que ponernos de acuerdo sobre el significado de las palabras.