Carlos Pagni hundido en la nostalgia de aquel alfonsinismo victorioso de 1983 nos quiere convencer que Scioli y Massa deberán llegar a un acuerdo de cara al 2015 solo para darle posibilidades de llegar al balotaje a una fuerza no peronista, je. Y además aprovecha para sugerir cual de los dos debería bajarse de la precandidatura presidencial. Según el periodista, Scioli asegura el status quo del generalato de gobernadores y barones varios, congelando el ascenso de los coroneles que anhelan desplazar al generalato.
Al menos no oculta un dato no menor: cualquier medición hoy da por ganador al tigrense que va en alza mientras Scioli va en baja."Las medidas que el Gobierno está adoptando, a pesar de sí mismo, en el campo monetario, cambiario, laboral, fiscal o financiero, tienen un correlato en la disputa de 2015. Los primeros en advertirlo son los sectores radicalizados del kirchnerismo. Ellos temen que el proceso... conduzca a un último consentimiento: la candidatura presidencial de Daniel Scioli.Scioli comparte ese diagnóstico. Y lo festeja. El oficialismo quedó instalado en la situación que él soñó en 2011. A la señora de Kirchner no le fue tan bien como para perpetuarse en el poder, pero tampoco le podría ir tan mal como para que la crisis la devore, junto a quienes se identifican con ella. Ni reelección ni naufragio: racionalización. Ésta es la apuesta de Scioli y de los demás gobernadores oficialistas cuando apoyan las decisiones económicas. Necesitan que el Gobierno sea heredable. No quieren verse en el espejo de Eduardo Angeloz, el radical que en 1989 debió representar a un oficialismo en llamas." http://www.lanacion.com.ar/1667769-del-ajuste-economico-al-ajuste-de-estrategias
El inexistente massismo sorprendió en las PASO del año pasado al estado mayor del imposibilismo -ahora que el oficialismo peronista ha vuelto a ser garante del status quo-, que tiembla ante cualquier atisbo de renovación. Tienen mucho que perder.
En cuanto al oficialismo efepeviano también se equivoca en agigantar la brecha entre lo que dicen y lo que hacen. El "inexistente" massimo, los obligó a replegarse espacialmente, a desplegar acciones para contener a los territoriales dentro de los estrechos limites del partido justicialista. A movilizarse para retardar lo que se pueda el inevitable bandazo. Si hasta juegan a festejar la captura de un peón mientras pierden un alfil al tanto que perjuran lealtad a quien dejan mal parada como la nueva Isabel, la que "no sabe como quedarse pero tampoco como irse".
El empoderamiento del pejota se parece a la reincidencia criminal porque marca el regreso del reo a la cárcel, con sus muros bien delimitados. Ensimismados en el peronismo se han puesto techo mientras disputan el piso con quien no tiene fronteras verticales en sentido ascendente.
La paragüería, el resignarse a la protección del partido justicialista, siempre fue una trampa para el peronismo en su conjunto y negocio para algunos dirigentes que terminan quedándose con cuotas partes de una estructura de poder que se derrumba.
La renovación no puede ni debe permitir que la encierren en el laberinto pejotista. Debe adaptarse a los cambios que se han registrado en la sociedad y en las fuerzas políticas, debe poder asimilarlos, porque esos cambios ya conviven en la diversidad de ideas, algunas hasta contradictorias entre si, que hacen al sistema político en su conjunto y si no son resueltos por la renovación seguirán siendo motivo de conflicto.
La renovación debe ser capaz de manejarse con la dialéctica necesaria para mantener tonificados los musculos de un movimeinto que debe ser transformador o no ser. Debe ser capaz de recrear las contradicciones de la sociedad en su seno, de procesarlas y resolverlas. Pero no puede ni debe darse el lujo de terminar su experiencia aparentando cambios de elencos gobernantes para dejar intacto el status quo que
Los que nos venden la unidad boba de 1983, el no sacar los pies del plato, no cuentan con que buena parte de sus coroneles ya les han tomado el tiempo. Todo el mundo sabe como sobrevivir y como evitar que los arrastren al fondo del precipicio.
La paragüería, el resignarse a la protección del partido justicialista, siempre fue una trampa para el peronismo en su conjunto y negocio para algunos dirigentes que terminan quedándose con cuotas partes de una estructura de poder que se derrumba.
La renovación no puede ni debe permitir que la encierren en el laberinto pejotista. Debe adaptarse a los cambios que se han registrado en la sociedad y en las fuerzas políticas, debe poder asimilarlos, porque esos cambios ya conviven en la diversidad de ideas, algunas hasta contradictorias entre si, que hacen al sistema político en su conjunto y si no son resueltos por la renovación seguirán siendo motivo de conflicto.
La renovación debe ser capaz de manejarse con la dialéctica necesaria para mantener tonificados los musculos de un movimeinto que debe ser transformador o no ser. Debe ser capaz de recrear las contradicciones de la sociedad en su seno, de procesarlas y resolverlas. Pero no puede ni debe darse el lujo de terminar su experiencia aparentando cambios de elencos gobernantes para dejar intacto el status quo que
Los que nos venden la unidad boba de 1983, el no sacar los pies del plato, no cuentan con que buena parte de sus coroneles ya les han tomado el tiempo. Todo el mundo sabe como sobrevivir y como evitar que los arrastren al fondo del precipicio.
8 comentarios:
Y cuales son los alfiles que perdimos? Mamita! Msssita debe ser el Rey.
Tienen muchos problemas muchachos. Claro, todavía no se dieron cuenta.
Che, no era que este pelado emulo de Sigfrido de Kaos era un analista fenomenal ?...ja ja... Linda fuga en Merlo, Omix.... Y las que faltan....
Renovación de la política... el otro día vi un afiche de un candidato de Ma$$ita para 2015 en 3 de febrero, que hasta no hace mucho era habitue en la barra brava de Chacarita (dicho sea de paso fue dirigente de ese club que hoy debe como 50 millones). Cuando ves la gente que acompaña, ¡mamita! que renovación ¿eh?
cuando hablan felipe y de mendiguren, me llora la foto del Pocho.
en estos dias que se vienen de mano dura conurbana
la pregunta del millón es que van a hacer
los kirchneristas no-peronistas
del movimiento evita
http://rib-moregeometrico.blogspot.com.ar/2014/02/experimentos-de-harlow.html
porque el circulo rojo ya habló por boca de duhalde
El trato para con Gustavo Menéndez me parece poco delicado, más allá de lo que indique la táctica y la estrategia:
Mendez
Una verdadera pena.
No maestro, el punto de unión con el alfonsinismo es otro. Pagni le está indicando que sus jefes (los de Pagni y los suyos) están queriendo que el trabajo sucio que imaginan, se haga y se desate bajo un mandato que puedan emparentar con el maldito k-peronismo, ese del cual reniega NYT, de manera que la secuela de inevitables estallidos sociales que su política (la de los jefes de Pagni, Massa y suyos)desataría haga la llaga equivalente a la hiperinflación de Alfonsín. El tiempo de ellos (ya no de ustedes...) es el siguiente a ese incendio. Un saludo desde Bahía Blanca, donde La Nueva Provincia los sigue mimando. Juan.
Mendez hizo lluvia de garrocha inversa como los concejales de Moreno. Ma$$a va a tener que reculetear en chancletas y volver a ascociarse con Macri.
Auspicia La Nueva Provincia (renovada)
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