Cada dia menos sciolismo

Cada fuerza política elige el momento para salir a la cancha, si puede resistir la tentación propia o la presión de los demás jugadores y outsider's que quieren obligarlo a jugar juegos ajenos, lo hará dentro de lo que estima es "su" momento para hacerlo.

El Sciolismo eligió estos días para salir, no muy de frente, fiel a su estilo, pero si un poco mas convencido. Giras al exterior con empresarios y simpáticas camionetitas naranjas que recorren el país con un Scioli 2015 "tildado" dan una tímida idea de continuidad con el kirchnerismo que contrasta con los mandados encargados a cumpas como Miguel Pichetto para que cubran lugares claves en momentos claves o a Jorge Yoma para que clame por una solución a la crisis como manda el escudo chileno ("por la razón o por la fuerza").

Nos preguntamos ayer si "el kirchnerismo llega(rá) con un candidato propio a la disputa electoral 2015 o cada uno de los que hoy pueden ser etiquetados como integrantes de esa fuerza vuelven a hacer la suya y se comprueba que no ha sido mas que un heterogéneo espacio que acompañó al gobierno nacional en su derrotero". 

Esta es una pregunta que deberá también responderla Daniel Scioli y sus adláteres. El parece jugado a que los kirchneristas lo sean hasta que se devele el enigma del candidato y el designado no sea otro mas que el y a partir de ese día Kunkel, Diana Conti, Adriana Puigross, D'Elía, Sabbatella, etc se re-organicen en la agrupación "Daniel eterno".

Yo saco otras cuentas. Para tener alguna oportunidad Scioli debe mostrar conducción en su territorio -el bonaerense que no es el suyo pero en el que está encaramado como herencia de la intervención velada que ordenó en su momento Nestor Kirchner- y ademas ser el candidato único del kirchnerismo en la PASO, queda así atrapado en lo que le queda a esa fuerza de representación del peronismo (máxime después de haber ajustado) y la progresía que está visto que ya se traga cualquier sapo. 

Las acciones de Scioli solo teniendo en cuenta estas dos condiciones de posibilidad (ojo que hay mas) valen menos que las de una heladería en la Antártida.

El panorama hoy en la provincia de Buenos Aires (en 2015 + de 11 millones de sufragantes, 39% del padrón nacional)  puede ser  interpretado a través de los movimientos de los intendentes.

El re alineamiento de Raul Othacehé (Intendente de Merlo,400 mil electores) es atacado por comentaristas de La Nación y de Pagina12 y por las redacciones de los mismos medios que le dedican titulares como el que sigue: "Raúl Othacehé, el nuevo aliado de Sergio Massa, un barón con "métodos violentos" (La Nación). A la vez que desde estos mismos lugares de culto empieza la fascinación por un Scoli que se muestra Jefe de Estado. El Stablishment  no se equivoca, ni por derecha e izquierda, pero no respecto de los que van a ganar sino a alentar a quienes mas convienen a sus intereses.

Mientras cierto kirchnerismo se siente aliviado por que se aleja un impresentable compañero de ruta que les cagaba el relato de la inmaculada concepción, el antikirchnerismo celebra el debilitamiento de su antagónico. Eso sucede porque siguen atados a las viejas formas de pensar la política.

Como bien señala un amigo, no se puede contabilizar el pase de los intendentes al Frente Renovador como una perdida propia del kirchnerismo. Eso es pasado. Los abandonos del Titanic por parte de los barones hoy son en detrimento de las posibilidades de Scioli que no puede garantizar la contención de estos en la provincia que gobierna (con fondos frescos, obras, herramientas de gestión y menos aún expectativa de imponer su candidatura a todo el peronismo en 2015) .

Para colmo sciolistas y cristinistas sienten que hay una bomba a punto de explotar. Bien lo refleaja la síntesis descarnada de @mazorcablanca: "Los intendentes FPV Espinosa (la Matanza 1 millon de electores) y Fernando Gray (Esteban Echeverría, 250 mil electores) salieron a aclarar que Massa es peronista. Toda una definición". Porque esto les llenó el culo de vértigo salieron estos días, al intento de contención de intendentes con promesas de difícil cumplimiento. Si las cumplen les comerán la billetera y cuando sea oportuno se iran porque la decisión está tomada, sino se la cumplen tendrán la excusa ideal para irse.

Scioli al igual que Macri quieren suplir con marketing lo que no consiguen con construcción política a la que rehuyen.

Scioli está mas cerca que Mauricio porque juega en el peronsimo su chance, eso solo los diferencia, por lo demás son mucho mas confiables que massita para el stablishment.

Pero para ganar en el peronismo hace falta garra, como bien decía la comentarista Esther en el blog de Abel Fernandez: "me da la impresión de que existe algo en la disputa interna por el poder en el peronismo que se convierte en una presión de selección bastante feroz, tal que los que logran pasar de punteros de unidad básica a candidatos a puestos muy altos son aquellos que aprendieron. ¿Aprendieron qué? Justamente, quizás, a tener vocación de poder y a construirlo y usarlo. A lo mejor no es así, y tiene que ver con la estrecha simbiosis histórica entre el peronismo y el sindicalismo. O a lo mejor es cuestión de mística, no lo sé" (http://abelfer.wordpress.com/2014/02/13/un-pedazo-de-historia/).

Es un poco de todo pero mucho mas de la primera. 

La disputa por ser el candidato no va de la mano con la de ser nuevo líder y es el liderazgo lo que vota el peronista, los candidatos no importajn. Ya probamos "Campora al gobierno" y duró apenas dias la experiencia. Nos interesa el power. 

La extrema audacia es el signo distintivo que provoca los bandazos de dirigentes y dirigidos hacia un nuevo liderazgo que se anima a hacer lo que no debe. Y es esa decisión temeraria la que no termina de demostrar Daniel en desmedro de sus posibilidades.

Igual, siempre queda una esperanza si falla la opción de heredar el poder en una sucesión incruenta.

A Scioli le queda una sola posibilidad y es la misma que tuvo Eduardo Duhalde su inmediato antecesor en la pretensión de ser el candidato natural del peronismo. 

Dio's quiera que esto no suceda