En algún lugar de Sudámerica

Refiriéndose a una versión periodística que afirmaba que  la renovación entrerriana había alcanzado acuerdos con sectores antidemocráticos, el intendente de Villaguay, Adrián Fuertes, desmintió diciendo que solo “chicanean a Massa porque no pueden frenar su crecimiento en todos los rincones del país y también de Entre Ríos” (*). Y no le erra el joven alcalde panza verde pre candidato a gobernador (no me quiero olvidar que también puja en mismo paloTavi Zavallo).

Lo que me gustaría tratar ahora es la inserción nacional de Sergio Massa.

 ¿Es tan arrollador el avance massista como afirma Fuertes?

Veamos al caso de Catamarca. Massa visitó esa provincia y la Gobernadora Corpacci no dudó en recibirlo y compartir un acto con el y sacarse una foto que marca el fin de la aplicación de la lógica amigo-enemigo, al menos a nivel de gobernadores golpeados electoralmente en 2013 y con posibilidades de re-elección.

Estos días pudimos leer en las paginas de El Ancasti: "Lucia Corpacci: "a los catamarqueños les importa que Catamarca esté en el centro de la escena, la foto con Massa fue muestra de madurez política"" (**);  y puede hacerlo por que mucha agua ha pasado bajo el puente  por el que transita la coalición gobernante. Una consecuencia lógica del desgaste de la gestión, la acumulación de errores propios y la proximidad del 10 de diciembre de 2015 es que ha desaparecido la validez universal de ciertas verdades reveladas en lo que fue el kirchnerismo, por ejemplo que el centro de la decisión de la actual coalición gobernante ha variado de Olivos a los centros locales.

El botón de muestra es la estratégica calificación de enemigo, adversario, aliado y compañero respecto a los que se encuentran de pié en el escenario pan peronista. Ya no es Olivos quien asigna los roles del guión político sino cada centro de poder local. De nada le valió al bocha Randazzo traer al ruedo una anacrónica adejtivacion "el que no está con Cristina no es peronista" para hacer control del daño que provocó una instantánea mas que incomoda que se agrava por haber permitido que el tigrense sea el último orador cerrando así el acto en el que se encontraron, algo que la gobernadora no permitiría a ninguno de los legisladores nacionales de su provincia.

Hay negociaciones en el pan peronismo y todos los temas están incluidos en el intercambio de figuritas.

Hay apuro, Corpacci tiene que decidir si adelanta las elecciones. Todo indica que
• se desembaraza de la suerte de los candidatos del kirchnerismo nacional superstite.
• se hace cargo de la lapidación del sello FPV.

• se abstiene de utilizar la sigla PJ que por ahora garpa mas que FPV aunque no tanto como el FR.

• que mas le ofrece a los renovadores para que jueguen dentro de la nueva sigla.

Es que la catamarqueña pertenece al selecto club de los que aún disponen de la chance reeleccionista, junto al cordobés Eduardo  Fellner en Jujuy, Gildo Insfrán de Formosa, la santiagueña Claudia Ledesma Abdala ( aunque en 2017 y no el año que viene, por que Sgo y Corrientes están desfasadas del cronograma electoral), Martín Buzzi de Chubut, el rionegrino Alberto Weretilneck, Daniel Peralta de Santa Cruz y Claudio Poggi de San Luis.

Si Corpacci accede al desacople, Catamarca no estaría sola desdoblando el comicio, algunas provincias están facultadas para ello, otras obligadas. Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, Tierra del Fuego, Neuquén y Salta, hasta ahora votan por separado, aunque es probable que Neuquén y Tierra del Fuego también lo hagan. Olivos pierde con esto margen de maniobra, capacidad de negociación y esto es solo el principio

Que otros motivos tendría Corpacci para enemistarse con el posesivo kirchnerismo de Olivos si no fuese porque hay sondeos serios  -y oficio- que señalan que en la provincia merodea el peligro (***).

¿Che pericolo?:
• de salir terceros de la mano del kirchnerismo nacional (el primer lugar en una simultánea con la elección presidencial se batiría entre el potente FCyS y el arrastre de Massa hacia sus candidatos locales) o
• de ser sectarios y excluyentes entre compañeros y abrir una grieta que le de posibilidades  a los Brizuela del Moral y su FCyS, el rotulo de fantasía que encubrió al sello identitario de su dirigencia, la UCR, que debía ocultarse por piantavotos.

Contrariamente a lo que afirmaban algunos respecto a que Massa debía jugar en las PASO del fpv porque de cortarse solo cargaría con la culpa de la derrota del peronismo nacional y eso lo lapidaría para cualquier pretensión futura, el siente que tiene el sartén por el mango si la tendencia de los gobernadores es salvar el cuero propio y no arriesgar su territorio para improbable triunfo nacional, porque le dice a cada coalición gobernante provincial lo mismo que le adjudicaban a el: si no te prendés y das libertad para apoyar al candidato presidencial que mas le convenga a cada intendente vas a cargar con la culpa de que la provincia quede en otras manos.

El modelo que estarían a punto de adoptar en el peronismo catamarqueño (y sus aliados) es justamente el de sus contrarios. El Frente Cívico y Social es una alianza provincial pero cada uno de sus integrantes tiene la libertad para apoyar al candidato nacional que sienta mas en linea con sus intereses, tradición política o posición ideológica.

•      Para Sergio Massa la separación de los comicios operaría como una ventaja.

Pero surgen dudas desde el massismo de cerrar filas con Corpacci. Son varias, massita quiere sello propio y no interna PASO en un nuevo sello y distinto del PJ  y FPV, quiere que se jueguen antes por el proyecto nacional (el suyo). Otro punto que la renovación tiene en cuenta y le genera mas dudas acerca de la sintonía con sus postulados es la iniciativa que parte desde el pan-peronismo para modificar el numero de miembros de la Corte Suprema de Justicia provincial  y librarse de la herencia que les dejó el Frente Civico y Social (que en clave caradura va a empezar el típico cacareo republico denunciando la violación de las instituciones). El peronismo provincial no duda y avanza unido hacia el objetivo de desarmar la pieza constitucional que opera como reaseguro oligárquico: una corte adicta al sector patricio catamarqueño, sin dejar en claro si es para reemplazar esa oligarquía por una clase dirigente innovadora y popular que cambie los patrones de acumulación y la matriz productiva o, defeccionando a su justificación histórica, sencillamente ser su reemplazo. Correr el riesgo de tocar instituciones sin que el fin valide los medios no forma parte del mínimun de corrección política que exigen el hombre y la mujer de a pié y massita en esta etapa no va a contrariar a su electorado.

Después, después veremos.

(*) http://zonanortevision.com.ar/13137/adrian-fuertes-chicanean-a-massa-porque-no-pueden-frenar-su-crecimiento

(**) http://www.elesquiu.com/notas/2014/7/15/ciudadania-332639.asp

(***) http://www.infocat.com.ar/index.php/columnas/se-comenta/4575-la-movida-politica-en-catamarca