viernes, 29 de abril de 2011

Perón la tenía más fácil

un gobierno (cualquier gobierno) debe asentarse en sectores cuyas aspiraciones e intereses sean funcionales a las metas que se ha auto-impuesto

un gobierno peronista (que se precie de tal) tiene siempre su columna vertebral en la clase obrera que se objetiva en el apoyo de alguna central obrera (CGT) eso lo hace mantener su opción preferencial por el más humilde en cualquier momento en el que la tensión obreros-patronos ponga a prueba de que lado está

pero, necesita también del apoyo o al menos la comunicación fluida con el empresariado

su condición de "tercerismo" lo ubica lejos del capitalismo del "laissez faire" y de los colectivismos estatizantes

es gobierno y gobierna para todos y con todos, y además el capital es necesario por que con la fuerza de trabajo nada más se hace laborismo y no peronismo, es decir que no se llega muy lejos en el cometido de dar una mejor calidad de vida a mas argentinos y argentinas. El ser sectario y excluyente tiene límites muy precisos

Perón empezó su prédica y acción en 1943 cuando el mundo tenía 3 tipos de imperialismos: los fascismos que eran una especie de dictaduras desarrollistas del primer mundo que cuando había tensión entre patronos y obreros fallaban a favor de la patronal, el comunismo y el capitalismo.

a poco de andar el General se enfrentó a un orden mundial bipolar en el que los imperios dividieron sus áreas de "influencia". Por un lado el capitalismo con los U.S.A a la cabeza y por el otro el comunismo con la URSS a la cabeza

"Ni yanquis ni marxistas, peronistas" fue la consigna de lucha

empero la Argentina estaba enclavada en el área de influencia (y patio trasero) de uno solo, el norteamericano

Perón cabalgaba en el gobierno y en la resistencia sobre esa primera y fundamental grieta del sistema. Se ofrecía de coto del comunismo cuando se sentía débil para que el Gran Hermano americano opere a su favor y cuando estaba más fuerte se abría al mundo y al gran Oso ruso para mantener a raya al vigía de occidente. Mientras tanto operaba a full para afianzar el movimiento no alineado que fungía de sindicato de los más débiles en la escena internacional

que zigzagueba ideologicamente entre los pensamientos permitidos es cierto, pero esa era la contradicción del sistema y no la suya, el era coherente, fue siempre coherente

Perón la tenía más fácil por cuanto la existencia real de un contendiente ideológico de fuste del capitalismo le daba credibilidad a la amenaza de adoptar su sistema si no se mantenían las condiciones que posibilitaban la persistencia peronista en la "opción preferencial por el más humilde"

"Pude ser el primer Fidel Castro de sudámerica" repetía una y otra vez

Carlos Menem, el primer peronista que gobierna coetáneo a la caída del Muro de Berlín y el derrumbe soviético, sin esa formidable herramienta que garantizaba margen de maniobra al peronismo, sucumbió a la avidez capitalista

no tuvo otro marco teórico en el horizonte que no fuera "el fin de la historia".

pasado el primer momento de desorientación el peronismo reordena la tropa en base a un paraguas populista latinoamericano que le devuelve el margen de maniobra, pero en comparación al de Perón es de menor intensidad y solo permite avances graduales y la confrontación con pocos sectores a la vez con el objeto de trocarlos funcionales a los planes del ejecutivo nacional (esto no es Francia, Inglaterra o USA aquí somos personalistas)

la CGT encabezada por Moyano acaba de movilizar (algo a lo que no son muy afectos los Kirchner) y la apretada sintesis de las palabras de su cara visible es el objetivo principal de los trabajadores argentinos y condición sine qua non de su apoyo al gobierno peronista de 2011/2015:
* la participación de los trabajadores en las ganancias
* participación en la conducción de las empresas
* participación en el poder político
* lucha contra el desempleo, trabajo en negro y trabajo esclavo

todo lo demas es secundario

5 comentarios:

horca dijo...

El análisis es fantástico. Agrego una ideíta menor, me parece que también el peronismo tiene que tener comunicación fluida con las clases medias, por lo menos para dividirlas y no tenerlas amontonadas aplaudiendo los bombardeos del 55. La clase media tiene en este país una incidencia en la legitimación simbólica muy grande y está bueno que el kirchnerismo se haya ocupado de partirla en dos. Gracias a eso el establishment ve tambalear su única base electoral posible y tiene que retroceder en los planteos contra la clase obrera. Claro que esta división todavía no pudo traducirse en una mejor visión de las capas medias respecto del sindicalismo y ese problema, que se arrastra desde hace añares, es complicado. Si Moyano no tiene aceptación fuera de los afiliados, hay un problema. En este punto el establishment sigue haciendo las cosas bien, o sea según su provecho. Es un tema muy difícil porque lograron que Moyano no se vea como un representante de los trabajadores, sino como un burócrata ladrón. y agresivo. Paradójicamente, me parece que la clase media sólo puede reconocer que los sindicalistas representan a la clase obrera en la medida que puedan ver que de algún modo también los representan a ellos.

Ricardo dijo...

Gran post.
Disiento -porque escuché todo el discurso del Hugo (fantástico, escribí sobre eso en mi blog)- con que haya pedido participar en la conducción de las empresas.
Un acierto la impronta porque es el escenario más grande que va a tener hasta las elecciones.

Saludos.

OMIX dijo...

Ok
Ricardo
lo agregué yo (yo pecador me confieso)
pero está tambien en el paquete de aspiraciones, tal vez en el pedir diez para que sacar tres

OMIX dijo...

Horca

Ay, ay nuestra relación con las capas medias
alguna nos vota siempre, sino es imposible ganar y somos sportivo ganar,
pero... es cierto, vamos a tener que ir aprendiendo a comunicarnos con ellos sin ser los incordiosos que solemos ser

beatriz m. dijo...

Las capas medias, las capas medias. las generalizaciones no sirven. El kirchnerismo ha acercado a ciertas capas, con otras, -un gobierno peronista-peronista- no lograrà por màs esfuerzos que haga o se traicione a sì mismo y se convierta en insulsos ucr o pros. Simplemente porque los valores de esos sectores tienden a ser los de las clases altas.La composiciòn del voto a Cristina està asentada en las clases bajas, medio bajas (en gran proporciòn) y en parte de la clase media y alta tambièn.

Como Beatriz Sarlo, "no nos entienden" , ni no nos entenderàn nunca porque no comparten nuestros valores, ayer, hoy y mañana. A alguna clase media le gustan los maquillajes para disimular, pero al peronismo, en general, le gusta andar de cara al viento y sin disimulo. Demasiado para estòmagos delicados.